Estamos viviendo una época de gran competencia entre las organizaciones por atraer y retener el talento y es posible que en el futuro cercano esta competencia sea incluso mayor. Por ello, resulta crucial gestionar las variables y los contextos para conseguir dicha captación y retención. Y, sin ninguna duda, el compromiso está entre ellos.
En el Modelo de Gestión Avanzada el compromiso se menciona de forma explícita en el tercer subelemento de Personas (P3: “Cómo favorecemos el compromiso y la motivación de las personas“), y se incluyen algunas recomendaciones de gestión al respecto. Pero ¿a qué nos referimos exactamente con “compromiso”?
Aunque en español este término se utiliza indistintamente como traducción de “engagement” y de “commitment”, nosotros vamos a hablar del primero, “engagement”. En el estudio “Who is Engaged at Work?: A Large-Scale Study in 30 European Countries” (2019) se recurrió a utilizar la siguiente definición para ese término:
“Un estado mental positivo y satisfactorio en el trabajo que se caracteriza por el vigor, la dedicación y la absorción” (…) Vigor se refiere a altos niveles de energía y resiliencia mental, la voluntad de invertir esfuerzo y la perseverancia ante las dificultades. La dedicación se refiere a un sentido de importancia, entusiasmo, inspiración, orgullo y desafío. Y la absorción se caracteriza por una concentración satisfactoria y la sensación de que el tiempo pasa rápidamente….”.
Desde la perspectiva de la gestión, un primer paso a abordar sería medir el nivel de compromiso de las personas. Una de las metodologías utilizadas en estudios científicos es el cuestionario “Utrecht Work Engagement Scale”, que contiene las siguientes preguntas:
- En mi trabajo me siento lleno de energía.
- Encuentro el trabajo que hago lleno de significado y propósito.
- El tiempo pasa rápido cuando estoy trabajando.
- En mi trabajo me siento vigoroso.
- Estoy entusiasmado con mi trabajo.
- Cuando trabajo, me olvido de todo lo demás.
- Mi trabajo me inspira.
- Cuando me levanto por la mañana tengo ganas de ir a trabajara.
- Me siento feliz cuando estoy trabajando intensamente.
- me siento orgulloso del trabajo que hago.
- Estoy inmerso en mi trabajo.
- Puedo seguir trabajando por periodos de tiempo largos.
- Para mí, mi trabajo es un reto.
- En el trabajo, tengo una gran resistencia mental.
- Es difícil desconectarme de mi trabajo.
- En mi trabajo siempre persevero, incluso cuando las cosas no van bien.
Otra metodología muy utilizada es la de la consultoría Gallup, que lleva años realizando encuestas sobre compromiso en el trabajo y facilitando resultados al respecto, por lo que está muy “rodada”. En este caso, se establecen cuatro ámbitos relacionados con el compromiso (crecimiento, trabajo en equipo, contribución individual y necesidades básicas), para los que se incluyen las siguientes 12 preguntas:
- Sé lo que se espera de mí en el trabajo.
- Tengo los recursos y equipamiento que necesito para hacer bien mi trabajo.
- En el trabajo, tengo la oportunidad de hacer a diario lo que mejor se me da.
- Durante la última semana he recibido reconocimiento o elogios por hacer un buen trabajo.
- Mi responsable o alguien en el trabajo se preocupa por mí como persona.
- Hay alguien en el trabajo que promueve mi desarrollo.
- En el trabajo, mis opiniones se tienen en consideración.
- La misión o propósito de mi empresa me hace sentir que mi trabajo es importante.
- Mis colaboradores o compañeros están comprometidos a realizar un buen trabajo.
- Tengo algún buen amigo en el trabajo.
- En los últimos seis meses, alguien ha hablado conmigo sobre mi progreso.
- Este último año he tenido oportunidades en el trabajo para aprender y crecer.
La utilización de este cuestionario ofrece un valor añadido interesante: los resultados obtenidos podrían compararse con los que obtiene Gallup en sus prospecciones (puede descargarse el informe de 2023 desde este enlace).
Todas estas propuestas pueden ser una buena base para comprender a qué nos referimos cuando se habla de compromiso de las personas en el trabajo y para empezar a trabajar su medición, lo cual nos ayudará a conocer nuestra situación e identificar las posibles áreas de mejora.
A las que después habrá que dar respuesta mediante acciones y proyectos, claro…
